12 abril 2007

Interlineado

Hay que leer entrelíneas el discurso onubense del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, para entender bien qué nos dijo este Sábado Santo tras las intervenciones de Parralo y Chaves en el pabellón Las Américas. Anunció, por ejemplo (con estruendo de aplausos), que en pocos días saldrán a licitación las obras para la conexión de Huelva con la estación sevillana de Santa Justa a través del AVE; pero puso el énfasis en que las obras no darán comienzo mientras que no estén garantizadas «todas las exigencias medioambientales», como para adelantarnos que no se va a acortar ninguno de los plazos del elefantiásico procedimiento administrativo para la ejecución de una infraestructura de estas envergaduras, que —con tantas cautelas y tanto alambique burocrático— se puede llegar a eternizar. Sé que no es políticamente correcto usar el humor negro, pero asumiré el riesgo de aventurar que en torno al 35 por ciento de los asistentes al mitin de hace cinco días corren serio riesgo vital de no poder llegar a montarse jamás en esos trenes supersónicos que nos dejarán en la puerta de Atocha en tres horas. Tal vez para atemperar los ánimos, Zapatero agregó que, una vez se acabe con todo el papeleo habido y por haber (tiembla, Amazonas), «las obras irán a alta velocidad, para tener cuanto antes la conexión que tanto necesita esta provincia». Dense cuenta de un detalle: ni se atrevió a hacer una estimación sobre cuándo podríamos tener las lanzaderas operativas, sobre cuándo empezarán efectivamente las obras y cuánto podrían tardar en concluirse... Más cosas: ¿puede significar un rejón de muerte para el proyecto del aeropuerto Cristóbal Colón esta confirmación de que (más tarde que temprano) Huelva acabará conectándose al AVE? Es cierto que el Estado nunca ha comprometido un solo euro para el aeródromo, pero sugiero la cuestión teniendo en cuenta que los planes de viabilidad a los que se ha condicionado la futura base aérea necesariamente tendrán que valorar la inminente licitación de las obras... ¿Y la línea férrea Huelva-Zafra? ¿Alguien piensa que es casual que Zapatero ni la mentara al relacionar el plan de inversiones de su Gobierno en Huelva para las próximas legislaturas, cuando ni se sabe si seguirá residiendo en La Moncloa? Y una cosa más: eso de anunciar el inicio del desdoble de la 435 sin que nadie sea capaz de precisar ni cuándo se va a producir efectivamente ni por dónde pasará en concreto ni hasta dónde va a haber una nueva «autovía», eso sí que es humor negro. Porque qué poco está ayudando la curva del chocolate al carné por puntos; ¿verdad, Pere Navarro?
Publicado en EL MUNDO Huelva Noticias el 12 de abril de 2007

Etiquetas: ,

2 comentarios:

Anonymous Anónimo ha dicho...

Las palabras vacías se acaban traduciendo en papel mojado. La clase política nos tiene, desgraciadamente, demasiado acostumbrados a este tandem de ineficacia, pero, oh, amigo Manuel, es lo que nos queda de aquí en adelante: mucho mitín cargado de polvora caducada e inócua y muchas frases rimbombantes para alumbrar titulares de prensa.
Saludos

12 abril, 2007 21:36  
Anonymous Anónimo ha dicho...

No sabes lo que dices. Huelva tendrá aeropuerto y AVE, y no lo podrá impedir ningún sevillano ni ningún vendido a los sevillanos

14 abril, 2007 07:40  

Publicar un comentario

Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]

<< Inicio