¿UN SIMPLE E INOCENTE DESPISTE?
LAS PIEZAS DEL PUZZLE
¿Un simple e inocente despiste?
Tras ver al arquitecto José Álvarez Checa fotografiándose con poderosos alcaldes de todo signo político (ora en Almonte con el socialista Paco Bella, ora en Punta Umbría con el popular José Carlos Hernández Cansino) durante la presentación de los más fantásticos proyectos urbanísticos municipales que se van a empezar a desarrollar en la provincia con carácter inmediato, últimamente es que no puedo dejar de pensar en las descalificaciones del ugetista Luciano Gómez al presidente de la Mesa de la Ría y candidato oficioso a la Alcaldía de Huelva, José Pablo Vázquez Hierro.
Según el secretario general de la FIA-UGT, la actividad profesional del ex decano del Colegio de Arquitectos lo invalida personalmente para la defensa honesta y rigurosa del sacrosanto interés general, ése por el que supuestamente se desviven todos y cada uno de los concejales electos que tenemos desperdigados por los 79 ayuntamientos onubenses. No se puede confiar los destinos de una ciudad a alguien cuya holgura económica depende del ladrillo, ha venido a decir Luciano, de modo que la pregunta me la pone a huevo: ¿y la mujer de un arquitecto? ¿Considera el líder sindical que es imposible imaginarse a la consorte tomando decisiones urbanísticas de calado?
La pregunta, cómo no, va referida a la candidata socialista a la Alcaldía de Huelva y vicepresidenta segunda de la Diputación Provincial, Manuela Parralo, quien a la vista está que piensa basar tanto la precampaña como la campaña electoral en dos ideas básicas: la necesidad de que haya un cambio político en Huelva (sólo en el Consistorio, se entiende; quién se va a atrever a cuestionar las telarañas de los despachos del Ayuntamiento de los ayuntamientos) y la garantía absoluta de un «urbanismo sostenible» que representan las siglas del PSOE, según manifestó el presidente Chaves el pasado 30 de junio en el Campus del Carmen.
Les refresco la memoria. Luciano Gómez dijo hace cosa de un par de semanas (creo que textualmente) que «siendo arquitecto, no me imagino a Vázquez Hierro gestionando el área de urbanismo». Y como sé que el de la UGT es un tío valiente, de los que se ponen al teléfono siempre que lo llamas o te saluda sin problema en cuantito que te ve, quiero invitarle a que nos diga en una de sus habituales tribunas libres qué le parece que la esposa de uno de los arquitectos más reputados de la provincia pueda terminar aupándose hasta la Alcaldía –gracias a la marca PSOE y a Pedro Jiménez– con la firme promesa de resideñar el PGOU de la capital para hacer una Huelva en la que «se viva mejor»...
Conozco a gente que comulga con el obrerismo del líder de la Federación de Industrias Afines. No son pocos los votantes a los que se les convence con soflamas de que la Mesa de la Ría ha sido un mero trampolín político para un tipo que lo único que pretende es llenarse los bolsillos con recalificaciones suicidas que supondrían mandar a miles de familias a la pobreza. Pero el problema es que, si uno dice que Vázquez Hierro no está profesionalmente en condiciones de asumir responsabilidades municipales, pone en tela de juicio el nombramiento de Manuela. Y dudo que esto sea un simple despiste de lo más inocente.
Sigamos con la capital. Y analicemos ahora la proliferación nefanda de codazos para salir en la foto que acometen la candidata socialista y sus condiscípulos. Últimamente ya no hay acto institucional, civil o religioso que se celebre en la ciudad de Huelva y en el que Manuela Parralo no aparezca fulgurante para dar la nota al arrullo de los flashes, y eso que decían que la verdadera princesa de la política onubense no se iba a manchar de populismo para sacarle votos al popular Pedro Rodríguez... También en las primeras elecciones Pepe Juan Díaz Trillo se nos presentó con el prurito de intelectual de Secundaria incapaz de cualquier bajo instinto político. Terminó pegándose el leñazo padre y se ha llevado siete ingratos años posando con coros rocieros y ofreciéndose para cada baile de San Vito. Manuela ha aprendido esa lección y en cada recepción, en cada inauguración, en cada visita se saca de la cartera la ficha de vicepresidenta segunda de la Diputación para que le abran paso y pueda enseñar los dientes a los fotógrafos de la prensa. El problema es que a veces los organizadores del acto no son colocadillos de tal o cual partido que reciben con resignación el codazo electoralista. Y así se pueden perder unos cuantos votos también.
La debilidad de Cejudo
Si algo le pirra a Pepe Cejudo es tener bajo control a los medios informativos, quizá porque en su día asumió la dirección de la revista por excelencia de nuestro Valverde natal, Facanías (que no Satanías), que alcanzó con él importantes cotas de calidad e influencia. Y esto es una especie de vicio: el que prueba siempre repite. Sólo conociendo bien esta debilidad de Cejudo se puede entender que en un pueblo con poco más de 13.000 habitantes coexistieran dos televisiones locales, una radio municipal, dos publicaciones semanales y dos revistas mensuales, aparte del universal gabinete de prensa dirigido por Pedro Domínguez. Ahora la revista del Ayuntamiento, Valverde 30 Días, se ha convertido en quincenal (Valverde 15 Días) y también en gratuita con una tirada de 2.000 ejemplares. En el editorial de su primer número proclamaba: «No nos temblará el pulso a la hora de denunciar todo aquello que vaya contra los intereses de Valverde del Camino». Ya van dos ediciones y aún sigo esperando que se estrenen con un valiente reportaje-denuncia. En este sentido, promete mucho Cabrujas, un tipo que ni siquiera puede firmar sus columnas no vaya a ser que se las devuelvan con queso. ¡Y a mí que me suena ese estilillo oficial...!
1) ¿Qué conocido empresario turístico onubense, con intereses en la playa de Punta Umbría, estuvo pujando muy fuerte para hacerse con las 1.200 hectáreas de terreno subastadas por la Agencia Tributaria a finales del año pasado y que finalmente fueron a parar a manos de Rumbo 5 Cero por 2,8 millones de euros?
Etiquetas: Almonte, Cejudo, Hernández Cansino, Manuela Parralo, Niebla, Pedro Rodríguez, Pepe Juan, PSOE de Huelva, Punta Umbría, UGT, Valverde
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