TRAS LA ÚLTIMA CAMPANADA
«Eso es lo que verdaderamente tiene que hacer el líder de un partido», pensará en su fuero interno Rodri al brindar con champán con los suyos. Porque el regidor onubense se siente incomprendido por muchos jerifaltes populares que a día de hoy siguen cuestionando su idoneidad para hacer partido. No perdonan al presidente que el proyecto del Área Metropolitana siga durmiendo el sueño de los justos y que dejara la recaudación en manos de Cejudo en cuanto la plantilla de la Agencia Tributaria le montó un par de protestas.
«A partir de la madrugada del 28 de mayo, a ver quién cuestiona el trabajo de quién», concluirá Perico entre carantoñas a su nieto, mientras el móvil se le va llenando de mensajitos con castos deseos para el Año Nuevo, trufados por esos concejales en la cuerda floja que confían en ganarse la continuidad en la candidatura con SMS corporativos y... ¿malversadores, Pepe Juan? Pregunto.
A la misma hora y al otro lado del puente, Manuela Parralo y su marido brindarán con cava mientras la candidata socialista sueña con ese primer día en el que entre triunfal en el mayor de los despachos del Ayuntamiento con un traje a la medida de la primera alcaldesa de la Historia de Huelva. «¿Seré recordada dentro de 26 siglos como la Argantonia choquera?», se preguntará para sus adentros, mientras ensaya el discurso más zorruno de la noche electoral: «¡Bah!, en realidad no aspiraba a hacerme con la Alcaldía a la primera. Mi proyecto está aún muy verde. Antes tengo que ser secretaria local del PSOE de Huelva y hacerme fuerte en la ejecutiva provincial...». ¿Les suena?
El candidato de IU, Pedro Jiménez, se ha comido disciplinadamente las 12 uvas, una a una y con todos sus huesos, y empieza a pedir sin parar. Una compañera en el futuro grupo municipal. Que Arazola se quede a poco más de mil votos de entrar en el Ayuntamiento. Que Perico pierda la mayoría y el PSOE vuelva a echar mano de la cartera para convencerles de la conveniencia de los pactos de progreso. Que Carlos Sánchez vuelva a ganar por los pelos en Bollullos y el PP no se ahorque ayudando a los socialistas. Que la debacle de Valverde no sea el principio del fin. Que Pérez Tapia termine por romper electoralmente en Fuenteheridos. Que el corteganense Antonio Marín no acabe dándose un leñazo. Que Paco Bella tenga que sentarse con ellos en Almonte. Que Cajasol sea tan piadosa como El Monte...
Barrero se conformará con que no se le suban a las barbas ni Genaro ni Isaías. Cejudo pedirá una mayoría absolutísima en Valverde con la que seguir mandando en el partido y en Diputación; Hernández Cansino, que el PP no le obligue a volver al bufete de abogados si no revalida la mayoría absoluta en Punta Umbría. Carmelo y Lagares, ‘Virgencita, que me quede como estoy’... A todos ellos y a todos ustedes, feliz 2007.
Difícil de Encajar
CAMBIO EN VALVERDE
Anunció hace unos días que sería candidato sólo si se lo pedían todos y cada uno de los miembros de asamblea de Izquierda Unida de Valverde «por aclamación» y «mediante voto secreto» (a ver cómo se come eso), y al final se ha quedado fuera de la lucha por la Alcaldía. Francisco Rodríguez Donaire, el portavoz de la coalición de izquierdas en la Diputación, afronta sus últimos meses como cargo público después de haber servido durante los cuatro últimos años de bisagra humana para el «pacto de progreso». El que se presentó ante los electores valverdeños como una alternativa de gobierno a Cejudo, terminó convirtiéndose en su más fiel escudero a costa de una militancia que no quiere saber más de política hasta los restos. Rocío Arroyo toma el testigo. Es la misma que, cuando se negociaba el acuerdo con los socialistas con la oposición de las bases de IU, advirtió que ella había entrado en política sólo por ver si podía hacerse con un despacho en el Ayuntamiento y no para estar cuatro años en la oposición. La misma que justificó la nula campaña de oposición de la asamblea local a la inolvidable Constitución Europea, porque eso no tenía nada que ver con ellos... Fuera de Valverde es donde se verá con mejores ojos el cambio.
Piezas Perdidas
1) Primero les adjudica la construcción de seis viviendas desde la empresa pública, que para eso es el que parte el bacalao ahí dentro. Después les compra un piso en La Antilla, que para eso gana uno su dinero. Finalmente, el proyecto lo redacta su cuñado, que para eso es el mejor del mundo entero. ¿Saben de quién les estoy hablando? Una pista más: ha dejado sin comprar un par de propiedades a ultimísima hora por miedo al qué dirán mediático... Exacto: ¡el bacalaero! ¿Quién si no iba a ser?
2) Último SMS: «Oido a Arenas: mayoria absoluta en Lepe, La Palma y La Granada. Raspada en Palos y Huelva. Pierdo Punta, Moguer, Gibraleon y Aljaraqe si no va Orta. A Carmelo m lo cepillo d portavoz; no s habla con compañeros. No m tienen hechas listas en el 40 x ciento d los pueblos».
3) ¿Por qué gusta tanto últimamente el candidato del PSOE a la Alcaldía de Lepe, Pepe Prieto, de almorzar con significados militantes del Partido Andalucista?
Etiquetas: Aljaraque, Almonte, Andévalo, Bollullos, Genaro, Gibraleón, Isaías Pérez Saldaña, IU, La Palma, Lepe, Manuela Parralo, Moguer, Pedro Rodríguez, Punta Umbría, Rodríguez Donaire, Trigueros